Entre 2001 y 2003, el alcalde de la capital Antanas Mockus implementó una iniciativa interesante en este ámbito, el programa de Ecobarrios, el cual tenía como objetivo: “…transformar nuestras comunidades en barrios ecológicos, donde el bienestar social y ambiental pueda ser desarrollado a través de la transformación de los comportamientos, la participación y la capacidad de los individuos para ser agentes de un nuevo desarrollo” (Alcaldía Mayor de Bogotá 2003:2) Por ello, en este contexto y teniendo en cuenta que este programa no ha sido analizado previamente, la presente investigación busca entonces, desde una perspectiva antropológica, entender que sucedió cuando los habitantes de estos barrios fueron expuestos al diseño e implementación de este programa; específicamente, cuáles fueron los efectos en términos de la producción del espacio social urbano desde una perspectiva social y cultural. El espacio, y su continua (re)producción, será considerado como un producto histórico (social, político e ideológico) donde los espacios urbanos son concebidos, percibidos y vividos a través de la vida diaria y las relaciones sociales (y decisiones) de las personas (agentes) y de su co- producción con la naturaleza. Este proceso de producción del espacio está caracterizado como un proceso dinámico de negociación y contestación, donde posiciones ideológicas y de planeación son reproducidas – al macro nivel de la ciudad – pero al mismo tiempo perspectivas alternativas son practicadas – al nivel micro, local del lugar (ejemplo el barrio) (Lefebvre 1991; Escobar 2000).

Una parte del análisis se enfocará entonces en la perspectiva de planeación, relacionada con la dimensión política e ideológica (global) del espacio (concebido) para tener una mejor comprensión de los efectos de este programa. El primer objetivo busca comprender el tipo de hibrido de planeación que los Ecobarrios representan: es una iniciativa de Eco-cities con influencias del mercado? O es un proyecto desde la perspectiva del mercado con un elemento “verde”? o tal vez una propuesta de Eco-city en contra de los modelos neoliberales y de mercado? Estos interrogantes serán abordados desde un enfoque etnográfico que busca demostrar que mas allá de los documentos los discursos y la historia publica de los Ecobarrios fue construida basada en las representaciones y significaciones de los planeadores, lo cual al final también creó un determinado tipo de imagen de ciudad.

La segunda parte del análisis está enfocada en entender los efectos de los Ecobarrios en términos sociales y culturales. Esto implica analizar cómo los habitantes de los barrios apropiaron, aplicaron, usaron o rechazaron este programa en sus vidas cotidianas, afectando sus procesos de construcción del lugar y generando cambios (como la re-significación de sus prácticas y discursos) o permanencias (evitando el cambio). Para ello, la categoría de ‘lugar antropológico’ (LA) será tenida en cuenta. De acuerdo a Escobar (2000, 2001) – y usando los términos de Lefebvre – el LA puede ser definido como una forma de espacio vivido y arraigado, una locación particular con algún sentido de limites, arraigo y vínculos a la vida cotidiana. Estos contextos locales significativos, se producen socialmente y se construyen culturalmente en medio de una tensión con las dinámicas globales, hibridas y macro del espacio y la identidad. Lo anterior se relaciona con el dominio de la cultura pero tambien con el del poder lo cual permite analizar como los actores socials (sujeto collective constituido por individuos) reaccionan, asumen o se resisten a mecanimos macro de control tales como políticas, planes y programas (micro – politics of space) (Foucault 1980; Gupta and Ferguson 2008).

La interpretación de estos LA también será desarrollada a través del enfoque etnográfico que permitirá identificar los impactos de los Ecobarrios en los procesos de construcción de identidad, en las prácticas sociales (diarias no diarias basadas en el lugar), relaciones de poder y sociales (humanos – humanos, humanos – naturaleza, humanos – cosas, humanos – espacio socialmente construido y territorio) y vínculos sociales (amistad, vecindad, comunidad) del sujeto colectivo de estos barrios. Por lo tanto, las representaciones culturales, los significados, percepciones, discursos, narrativas y relaciones espaciales serán tenidas en cuenta (Cucó 2004). El anterior análisis será desarrollado dentro del campo de la antropología urbana, desde un enfoque post-estructuralista (con influencias del interpretativismo y de la teoría del actor).